Alpaca-in-Chief irrumpe con irreverencia y profundidad, y en “Ex-God in a Toga” nos entrega una sátira existencial que baila entre lo absurdo y lo sublime.

Hay proyectos musicales que se presentan como enigmas, y Alpaca-in-Chief es uno de ellos. Este artista norteamericano-chileno no busca encajar en moldes ni complacer algoritmos. Su música es un collage de referencias culturales, filosóficas y emocionales, ensambladas con una libertad que recuerda a los mejores momentos del art rock y el indie experimental. Pero lo que realmente lo distingue es su capacidad de contar historias que parecen imposibles, y sin embargo resuenan profundamente.

“Ex-God in a Toga” es una de esas historias. Desde el título, el tema nos lanza a un universo donde lo divino ha sido degradado, donde los dioses ya no dictan destinos sino que vagan por la tierra con vestiduras ridículas y dudas existenciales. El protagonista "ese ex-dios vestido con una toga" parece más un actor fracasado que una figura mitológica. Pero en su caída hay una belleza melancólica, una humanidad que nos interpela.

La canción se construye sobre una base rítmica juguetona, casi burlona, que contrasta con la densidad de su contenido. Hay sintetizadores que zumban como pensamientos erráticos, guitarras que entran y salen como recuerdos, y una voz que no canta para impresionar, sino para confesar. El tono es teatral, pero nunca vacío. Cada frase parece sacada de un monólogo interior, como si el ex-dios estuviera hablando consigo mismo en un baño público a las tres de la mañana.

Lo más fascinante es cómo Alpaca-in-Chief logra que esta figura absurda se convierta en espejo. Porque todos hemos sido ese ex-dios alguna vez. Todos hemos sentido que perdimos el control, que lo que antes era sagrado ahora es rutina, que la toga ya no nos queda. Y en ese reconocimiento, la canción se vuelve íntima. No importa si no entendés todas las referencias: el sentimiento está ahí, claro como el eco de una risa que se apaga.

Para quienes buscan música que desafíe, que juegue, que proponga sin explicar demasiado, Alpaca-in-Chief es un descubrimiento que vale la pena. “Ex-God in a Toga” no es solo una canción: es una escena, una metáfora, una provocación. Y como toda buena obra, deja más preguntas que respuestas. Porque a veces, para entender quiénes somos, necesitamos escuchar a un dios caído que aún se atreve a cantar.

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