DESU TAEM: El rugido sincero del rock salvaje

Hay proyectos que no se explican, se sienten. DESU TAEM es uno de ellos. No nació para encajar ni para agradar a todos. Nació para sacudirte, para hacerte gritar, para que te arranques el alma y la vuelvas a poner en su sitio. Es un ritual de padre e hijo. Shan y Nick que convierte ideas desquiciadas en canciones que no piden permiso. Las escupen. Las lanzan. Las viven.

DESU TAEM no es una banda, es un manifiesto. Un grito retro que se alimenta del rock más crudo y visceral, ese que no teme sonar sucio, incómodo, pero profundamente humano. Su lema es claro, full immersion. Y vaya si lo cumplen, cada tema es una zambullida sin salvavidas en un mar de distorsión, sarcasmo y verdad.

“Black Hearted Clown”: el espejo roto del alma. Desde el primer acorde, el tema te agarra por el cuello. No hay introducción amable ni melodía complaciente. Hay un riff que parece salido de un garage maldito, una batería que golpea como si quisiera romper el suelo, y una voz que no canta: escupe, confiesa, se desangra.

El protagonista, ese payaso de corazón negro, no es un personaje. Es un símbolo. Representa la máscara que todos usamos, el humor que esconde la tristeza, la risa que tapa el grito. DESU TAEM lo pinta con crudeza, sin metáforas rebuscadas, sin maquillaje. Es un retrato de lo que pasa cuando la autenticidad se pudre y se convierte en espectáculo.

Musicalmente, el tema es un homenaje retorcido al rock de los 70, con guiños al punk más sucio y al glam más decadente. Pero no hay nostalgia, hay furia y hay presente. Nick, el hijo, se encarga de traducir las ideas de Shan en una producción que no busca perfección, sino impacto. Y lo logra. Cada sonido parece grabado con las uñas, cada pausa es una amenaza.

Lo más fascinante de “Black Hearted Clown” es que, a pesar de su agresividad, tiene alma. No es solo ruido sino más bien una catarsis. Es el tipo de canción que no se escucha, se sobrevive. Y cuando termina, no sabés si reír, llorar o volver a ponerla.

DESU TAEM no está en Spotify para sumar seguidores. Está para incomodar, para provocar, para recordarte que el rock no es una fórmula, es una actitud. Shan lo dice sin rodeos: “All aspects of rock n roll and a good hard kick in the ass to help you really feel it.” Y lo cumple.

Si sos de los que buscan música que te sacuda, que te haga pensar, que te obligue a sentir, DESU TAEM es tu próxima obsesión. Y cuando estés listo, poné “Black Hearted Clown”. Pero no lo hagas en silencio, gritá, rompe algo y lo más importante siente.

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