DESU TAEM y “Spontaneous Zombie Hacky Sack Circle”: Rock salvaje, sin filtros y con alma familiar

En tiempos donde el rock parece haber sido domesticado por algoritmos y playlists prefabricadas, DESU TAEM aparece como una anomalía gloriosa. Este dúo norteamericano, formado por Shan y su hijo Nick, no busca encajar en ningún molde. Su propuesta, autodenominada Savage Retro Rock, es una inmersión total en el caos creativo, la distorsión emocional y la libertad sonora. Y si hay un tema que encapsula esa filosofía, es “Spontaneous Zombie Hacky Sack Circle”.

Riffs como latigazos, batería como metrónomo del caos, desde el primer segundo, el tema te lanza al centro de un círculo imaginario donde zombis juegan hacky sack. Es absurdo, sí, pero también profundamente simbólico: la repetición, el juego, la descomposición. Las guitarras rugen con una estética retro que recuerda a Sabbath y Jane’s Addiction, pero con una crudeza que no busca homenajes, sino catarsis.

Shan no canta: escupe verdades, delirios y visiones. Su interpretación tiene algo de punk, algo de spoken word, algo de ritual. Es como si estuviera canalizando una energía que no puede contenerse. Y Nick, desde la producción y los instrumentos, convierte esa locura en arquitectura sonora.

Todo en DESU TAEM es autogestionado. No hay disquera, no hay marketing, no hay búsqueda de fama. Hay música hecha por necesidad, por impulso, por amor al ruido. “Spontaneous Zombie Hacky Sack Circle” no fue creada para agradar, sino para liberar. Y eso se siente en cada compás.

Con diez álbumes y más de 190 canciones, DESU TAEM ofrece un universo sonoro que va del metal al grunge, del rock psicodélico al punk existencial. Cada tema es una confesión, una herida, una broma interna. Y todo nace de una dinámica familiar única: las ideas delirantes de Shan, hechas realidad por el virtuosismo de Nick.

Si estás cansado de la música que suena como si hubiera sido diseñada por comité, DESU TAEM te ofrece una alternativa cruda, honesta y profundamente humana. “Spontaneous Zombie Hacky Sack Circle” es solo una puerta de entrada a un mundo donde el rock aún tiene dientes, donde cada canción puede dejarte con un moretón emocional… o con una sonrisa torcida.

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