RISE y el vértigo de lo no dicho: una inmersión en “Lost For Words”
- Diana
- hace 37 minutos
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Hay canciones que te invitan a pensar. Otras, a bailar. Y luego están aquellas que te sacuden desde el primer acorde, que no piden permiso para entrar y que, cuando terminan, te dejan con el corazón latiendo un poco más rápido. “Lost For Words”, el más reciente lanzamiento de la banda británica RISE, pertenece a esa última categoría. Es una descarga de energía pura, pero también una declaración de identidad.
RISE no es una banda que se conforme con lo convencional. Desde Liverpool, ciudad que respira música en cada esquina, este cuarteto ha sabido construir un sonido propio, reconocible desde los primeros compases. Sam Kinley, con su bajo firme y voz melódica, lidera una formación donde cada integrante aporta una capa esencial: Paul Kinley en los teclados, aportando texturas que elevan; Alex Mahoney en la batería, marcando el pulso con precisión quirúrgica; y Brian Petch, cuya guitarra no solo acompaña, sino que narra.
“Lost For Words” es, en esencia, un torbellino emocional disfrazado de himno rockero. La canción arranca con una energía que no da tregua. La guitarra de Petch entra con una claridad cortante, como si abriera una grieta en el silencio. El bajo y la batería se entrelazan en un groove que empuja hacia adelante, mientras los sintetizadores de Paul Kinley aportan una dimensión casi cinematográfica. No es solo rock. Es una experiencia multisensorial.
La voz de Sam Kinley, melódica pero con filo, guía la narrativa con una mezcla de vulnerabilidad y determinación. Aunque el título sugiere una pérdida de palabras, la canción está cargada de intención. Es el sonido de alguien que ha sentido demasiado y que, al no poder expresarlo con frases, lo hace con acordes, con gritos contenidos, con silencios estratégicos.
Lo que distingue a RISE es su capacidad para equilibrar lo melódico con lo visceral. Hay una estructura clara, casi pop en su accesibilidad, pero también hay guiños al rock progresivo, a esa tradición británica de bandas que no temen explorar. “Lost For Words” podría sonar en una sala indie de Londres o en un festival al aire libre, y en ambos contextos funcionaría con la misma intensidad.
Para quienes buscan música nueva que no suene a fórmula reciclada, RISE ofrece una propuesta honesta, vibrante y profundamente humana. “Lost For Words” no es solo una canción: es una invitación a sentir sin filtros, a dejarse llevar por la fuerza de lo no dicho.
Y si esto es apenas una muestra de lo que tienen para ofrecer, vale la pena seguirles la pista. Porque cuando una banda logra que el silencio pese tanto como el sonido, sabés que estás ante algo auténtico.